Los panes son de verdad... el huevo frito es un acerico (alfiletero, pin cushion)
que hice hace un par de semanas para un intercambio de mi grupo de patch...
¡¡¡es superdivertido!!!
Sí, es cierto, no tengo perdón porque hace un mes que escribí el últim post... y me sabe a cuerno quema'o repetir aquello de que me fallan las fuerzas, que no se ha inventado aun vocablo alguno que acierte a definir el agotamiento infinito que padezco y que el tiempo no me alcanza ni de lejos para otra cosa que no sea trabajar... Además, escollos, tropiezos, glubs agónicos de pez fuera del líquido elemento, stress y otras lindezas me tienen atrapada entre sus redes... Ando obsesionada con dedicar mi infinitesimal tiempo libre, cada nanosegundo, a la costura... porque ando enfiebrada con la creatividad y porque lo único que verdaderamente me alivia el stress es el patchwork, que me cuida la psique, me acuna la razón y me templa el alma, es la mejor medicina.
Fuera de eso... tantas cosas. La relación con la salvaje de mi jefa ha mejorado mucho, no es que ella haya mejorado en su carácter (bueno, poquitín más se contiene, porque Laurita Dinamita amenazó con pintarse de colores y pidió el finiquito... y la cosa se templó, a Dios gracias, pero ella sigue teniendo el mismo carácter de mierda que un Pitt Bull perennemente cabrea'o), lo que pasa que yo creo que me ha cogido el paso y me ha tomado la medida, y también, porqué no decirlo, que le resulto mu' salá y que se ha dado cuenta que a veces sus órdenes me las paso por el forro porque no alcanzo con el tiempo... en fin, o a lo mejor es que a mi se me ha pasado esa mezcla de pánico y mala leche que me inspiraba y ya me he ido acomodando a la realidad diaria, que también puede ser.
De lo demás... subes y bajas, fríos y calores, sobresaltos y monotonía, sonrisas y lágrimas, claros y oscuros... en definitiva, la vida. Quiero que los cambios lleguen ya, que la normalidad se instale, y es que en esta montaña rusa de emociones que vivo ni siquiera el tiempo me ayuda a verlo todo con calma, porque anda enloquecido y me revienta las referencias... donde debería helar se derrite el hielo y donde las temperaturas se deberían templar los pingüinos amenazan con tomar por asalto los centros comerciales... ¿cómo verlo todo en un plano monocorde de aberrante normalidad?... Pos no, así no se puede.
Pero no crean... entre unas y otras, sigo siendo la de siempre, aunque a veces me escondo tanto que me cuesta encontrarme, pero sigo ahí... jodiendo la paciencia de Doña Madre y siendo punto de referencia de
MiBen, que tampoco lo está teniendo nada fácil.
En fin queridas... agradezco a Mabel, Câline y Adriana sus gritos de inconformismo, para que vean que soy niña güena y obedezco cuando se me reclama... No sé si mañana vuelva, quién sabe, porque les juro que la intención la tengo, pero los músculos se me duermen de puro agotamiento y los huesos al final del día los sientos como caldo caliente... la cama es el único consuelo y el sueño el trofeo más deseado. ¿Me estaré haciendo vieja?... no lo duden, es así, pero aun me queda cuerda.
Besos... estupendos seres humanos.