01 febrero, 2006

ESTRENANDO FEBRERO


Creo que es la primera vez en mi vida que me alegro de que febrero sea el mes corto por excelencia, que el tiempo se agote rápido y los días se queden cojos al final en el calendario... la espera se me hace eterna, y cualquier intento de arañarle al futuro aunque sean nanosegundos es un esfuerzo titánico... así que ustedes vosotr@s dirán lo fantástico que puede llegar a ser este anodino mes, porque no deja de ser como cualquier otro, cuando al final del mismo se quema una etapa que por antojo pondría a arder ahora mismo. Ya queda menos, Mi Ben.

Hoy he comido en el centro con una amiga, Luisa, teníamos tiempo que no nos veíamos y nos hemos puesto al día con algunos temas... temas sobre hombres del pasado, sobre hombres del presente (Mi Ben) y las expectativas con los hombres del futuro de ella, porque yo lo tengo, cuando menos, definido en la proximidad... a Dios gracias. Y montadas en ese acento cantaito venezolano, que me pone el corazón a volar porque los recuerdos hermosos se me amontonan, nos hemos despachado un almuerzo sabroso en el restaurante del Corte Inglés, rodeadas de marujas pudientes, jubiladas socialmente activas, japonesas estrábicas, algún rubio nórdico con cara de pero-qué-buena-es-la-dieta-mediterránea-por-Dios, y turistas de cualquier índole sintiéndose volar sobre los techos de la Plaza del Callao... porque menuda vista tiene aquello. Y mientras, Luisa seguía hablando de hombres y yo escuchando... porque a estas alturas de la película, cada vez que abro las fauces, lo primero que sale es Mi Ben... y ya sabemos que lo poco agrada y lo mucho cansa... pero que alguien me pregunte si me importa, que verás la contestación... juas, juas.

Hoy hemos estrenado febrero... he tomado sidra con Luisa, he comprado el regalo de San Valentín, visitado el Corte Inglés, mirado de soslayo un homeless drogadicto que yacía en toda la mitad del medio de la calle Preciados, con una caja de puros desgastada a dos palmos de su nariz, un breve vómito agónico y a escasos dos metros de una pareja de guardias, de esos que se anuncian como de movilidad o vaya usted a saber... Esta ciudad se está pudriendo y el alcalde se empeña en remover los cimientos pa' que siga saliendo mierda... perdón por este brevísimo momento reflexivo. Pero hoy hemos estrenado febrero, y para celebrarlo, he comprado ese billete de avión deseado... gracias Dios mío, por iluminar al fulano que fuera, y que recortara dos días a este bendito mes... gracias.

Hoy hemos estrenado frebrero, y aunque el hedor de esta ciudad a veces se haga insoportablemente intenso, no puedo dejar de celebrar la vida... qué le vamos a hacer, a lo mejor es que yo también me estoy pudriendo, pero no puedo evitarlo... estoy feliz de estar viva.

Besos... estupendos seres humanos.

2 Comments:

At 02 febrero, 2006 12:44, Anonymous Anónimo said...

pero para dónde es el billete de avión, para dónde??????
gloria

 
At 02 febrero, 2006 12:46, Blogger Tweesita said...

Niña... pos... ¿pa' dónde va a ser?... Pa' PUERTO RICOOOOOOOOOOOOO... Yeaaaaaaaaaaaah

 

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